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Las Personas que nos Acompañan a NUESTRAS Citas Médicas

Alerta Medica

  • Somos su principal paciente.
  • Traer a un asistente no es una indicación de un bajo nivel de capacidad.
  • Eduque a su personal de oficina y auxiliares médicos.
  • Obtenga una comprensión básica de la relación que tenemos con nuestro asistente.
  • Nuestros asistentes podrían solicitar ayuda adicional cuando nos ayudan con actividades físicas.
  • Evalúe las necesidades y capacidades de nuestro sistema de apoyo primario.
  • Reconozca y respete nuestra privacidad.
  • No se preocupe si llegamos a nuestra cita solos.

Antecedentes

Algunos de nosotros con discapacidades físicas y cognitivas podemos llegar a una cita médica con otra persona que nos ayude durante nuestra visita. Esta persona puede ser un asistente pagado, un miembro del personal de un centro de residencia asistida, un familiar o un amigo/a. Estos asistentes de salud pueden servir en una variedad de funciones importantes durante la cita, como transportarnos a su consultorio, llenar documentos y ayudar con tareas físicas como quitarnos la ropa y subir a una mesa de examinación. También pueden facilitar nuestros intentos de comunicación. Cada asistente desempeñará un papel diferente y único dependiendo de nuestras necesidades específicas.

Hay algunas cosas que nos gustaría que recuerde cuando visitamos su consultorio con otra persona.

Reconozca nuestra autonomia

Ante todo, somos su principal paciente. Por favor, evite frases tales como, "¿Cómo le está yendo a ella?" o "¿Donde siente el dolor él?" Reconozca el hecho de que vivimos dentro de nuestros cuerpos. Trate de hablar directamente con nosotros. Muchos de nosotros somos conscientes de los cambios en nuestros cuerpos y podemos responder a sus preguntas.

No haga suposiciones

Por favor, no asuma que la presencia de un asistente personal o el diagnóstico de un individuo es una indicación automática de competencia. Puede que sea más fácil y más rápido comunicarse con los miembros familiares o acompañantes, pero eso hará que no nos sintamos capaces o respetados como su paciente.

Entrene a su personal

Su personal de oficina y auxiliares médicos a menudo son quienes marcan la pauta de nuestra visita. Por favor, demuestre y entrene a su personal sobre maneras respetuosas de comunicarse con los pacientes que tienen discapacidades. Ellos deben tener paciencia y mantener un diálogo con nosotros. Otros ejemplos de tareas útiles pueden incluir: mover muebles fuera de nuestro camino o ayudarnos a llenar documentos administrativos cuando sea necesario.

Comprendiendo nuestra relacion

A veces puede ser útil y necesario incluir a nuestro asistente o ayudante de salud en la conversación. Esto generalmente está bien, especialmente si usted tiene nuestro consentimiento. Si es posible, trate de entender cuál es nuestra relación. ¿Participa esta persona activamente en nuestras vidas? ¿Parece que nos tratan con dignidad y respeto? ¿Están ellos abogando en nuestro nombre? ¿Le dan prioridad a lo que nos conviene?

Evalúe nuestro sistema de apoyo

Cuando recomiende un tratamiento en casa o un cambio de estilo de vida, puede ser útil evaluar las necesidades y capacidades de nuestro sistema de apoyo primario. ¿Tendrá un impacto directo en nuestro asistente este tratamiento adicional? Si se espera que nos ayuden con esta nueva tarea, ¿están dispuestos y capaces de cumplir cualquier requisito físico o psicológico? Si no es así, ¿sería necesaria una referencia o un plan alternativo?

Pregunte si es necesaria alguna ayuda adicional

Nuestros asistentes o miembros de la familia pueden ser muy útiles con algunas tareas físicas, pero es probable que no puedan hacerlo todo. Por ejemplo, puede que necesiten ayuda al posicionarnos en una mesa de examinación que está muy elevada o de difícil acceso u otras actividades físicas inusuales.

Respete nuestra privacidad

Puede que no queramos hablar sobre ciertos temas mientras nuestro asistente remunerado o miembro de la familia está en la sala. Por favor, pregúntenos si hay algo sobre lo que queramos hablar en privado. Para aquellos de nosotros que tenemos dificultades con la comunicación verbal, proporciónenos una dirección de correo electrónico segura u otro canal de comunicación privada.

Puede que lleguemos solos a la cita

No se sorprenda si a veces nos presentamos a la cita solos, sin nadie que nos acompañe. No siempre necesitamos o deseamos ayuda. De alguna manera podremos resolver la logística de nuestras citas solos con usted.

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