La discapacidad es una parte natural de la experiencia humana. Las diferencias en la capacidad no disminuyen el derecho de las personas a disfrutar de la oportunidad de independencia, productividad, integración e inclusión en la comunidad. La ley reconoce que las personas con discapacidades del desarrollo requieren servicios y asistencia especializados de por vida. Para eliminar las barreras y satisfacer las necesidades de las personas con discapacidades, sus familias y sus cuidadores, los apoyos deben brindarse de manera coordinada y culturalmente competente.

Con el propósito de determinar la elegibilidad para servicios y apoyos, la Ley de Discapacidades del Desarrollo y Derechos Civiles del año 2000 define el término "discapacidad del desarrollo" como una discapacidad grave y crónica de un individuo que es atribuible a un impedimento mental o físico o una combinación de trastorno mental e impedimentos físicos que se manifiestan antes de que el individuo cumpla los 22 años y es probable que continúen indefinidamente. Las discapacidades del desarrollo resultan en limitaciones sustanciales en tres o más de las siguientes áreas funcionales: auto cuidado, lenguaje receptivo y expresivo, aprendizaje, movilidad, autodirección, capacidad de vida independiente y autosuficiencia económica.

El término "discapacidad del desarrollo" es un concepto creado por la sociedad. La definición federal se basa únicamente en la función; sin embargo, muchas definiciones de algunos Estados se basan en categorías de diagnósticos específicos, como parálisis cerebral, autismo, epilepsia, lesión cerebral traumática y discapacidad intelectual.

Las personas con discapacidades del desarrollo tienen un desarrollo neurológico atípico que genera desafíos en algunos o todos los siguientes aspectos: 1) cognición, 2) procesamiento sensorial, 3) habilidades motrices finas y gruesas, 4) umbral de convulsiones y 5) comportamiento y salud mental. Las fortalezas y los desafíos en cada una de estas áreas deben evaluarse para cada individuo. Las personas con discapacidades corren un mayor riesgo de sufrir problemas de salud secundarios, como obesidad, caídas, enfermedades dentales y disfagia.  Muchos estudios han documentado altas tasas de problemas de salud y hospitalizaciones entre personas con discapacidades del desarrollo. Los estudios que incluyen exámenes de salud demuestran altas tasas de problemas médicos no detectados que requieren acción. Las personas con discapacidades del desarrollo tienden a sufrir una carencia de servicios médicos insuficientes.

Referencias

1. Código de Bienestar e Instituciones de California §4512.

2. Declaración de Derechos sobre Discapacidades del Desarrollo y Asistencia de 2000. 42 USC 15001

3. Odom SL, Horner RH, Snell ME, Blacher J, eds. Manual de Discapacidades del Desarrollo. New York: The 

    Guilford Press.

4. P. May, comunicación personal. Los cinco conceptos esenciales de la medicina del desarrollo.